Psicología integral

La teoría humanista en psicología incorpora una variedad de técnicas terapéuticas que se centran en el potencial individual de cada uno y hacen hincapié en la auto-realización personal.

El psicoterapeuta en este enfoque funciona para entender la experiencia de un individuo desde “su” punto de vista.

Conocer los fundamentos biológicos que subyacen en nuestros pensamientos, comportamientos y valores nos ayudan a entender nuestro funcionamiento como un todo, mente (cerebro) y cuerpo.

Es una rama de la Neurociencia que estudia las relaciones entre el cerebro y la conducta tanto en sujetos sanos como en los que han sufrido algún tipo de daño cerebral.

Su objeto de estudio es el conocimiento de las bases neurales de los procesos mentales complejos.
La neuropsicología estudia las bases neuroanatómicas en relación a los procesos mentales como: atención, memoria, lenguaje, percepción, praxias, funciones ejecutivas y emoción. Y cómo todo unido, nos hace ser quiénes somos y cómo nos enfrentamos al mundo.

Permite a la persona tomar consciencia de sus pensamientos y conductas presentes, para modificarlas por otros patrones más saludables, eficaces y flexibles.

Esto permite una gestión con menos sufrimiento de los acontecimientos presentes y una generalización de lo aprendido para situaciones y circunstancias futuras.

Aplicando el famoso aforismo mente sana en cuerpo sano (men sana in corpore sano) en consulta hago una valoración lo más completa posible de todo el “conjunto”.

Así analizo la postura, la boca, la columna, la función gastrointestinal, las analíticas que puedas aportar, la audición, patrón de sueño, alimentación, etc.

De esta manera podemos tener una valoración más amplia y podremos establecer relaciones entre el estado del cuerpo (incluido el cerebro) y nuestra mente, pues ambos son inseparables y se influyen mutuamente.

Esta valoración completa, integrativa u holista se realiza tanto en adultos como en menores.

Es la disciplina desarrollada por el Doctor Alfred Tomatis, y que se sintetiza en el llamado Efecto Tomatis, reconocido por la Academia de Medicina y de las Ciencias de la Universidad de París en 1957.

La APF describe la interdependencia entre el oído, la formación de la voz, el cuerpo y la mente. El Doctor A. Tomatis (1920-2001) médico francés, especializado en otorrinolaringología, científico y especialista en trastornos de la audición y el lenguaje, estuvo a lo largo de su carrera muy interesado en la relación existente entre el oído y la voz, y en las funciones que el oído desempeña más allá de la simple escucha.

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